El nuevo Project Management en la era digital
Aceleración, elasticidad y mucho más. El nuevo project management hace honor a la época en que vivimos y se digitaliza, exprimiendo lo mejor de las tecnologías. Todas las posibilidades de los nuevos avances se ponen al servicio de una gestión que gana en efectividad y que se beneficia de la información compartida, gracias a un nivel superior de integración de datos.
Cualidades del nuevo Project Management
La gestión de proyectos en un entorno digital permite aprovechar los grandes datos acumulados de otras iniciativas para disfrutar de una mejor información de gestión. Al mismo tiempo, el uso de herramientas digitales ofrece la oportunidad de optimizar los flujos de trabajo, que se vuelven más ágiles, llegando incluso a llevarse a cabo en tiempo real.
Un Director de Proyecto hoy día debe estar preparado para trabajar y decidir a alta velocidad y, para ello necesita ser capaz de alinearse con las necesidades del nuevo project management y:
- Proporcionar información sobre sus proyectos a cualquier persona en cualquier momento y a través de cualquier dispositivo.
- Analizar en tiempo real los datos emitidos por los equipos de proyecto para detectar desviaciones de forma inmediata y tomar acción sin demora.
- Aumentar la eficiencia de los equipos al dotarles de feedback de calidad, objetivo y más transparente que nunca, que pueden aplicar inmediatamente al minimizarse las latencias.
Pero la rapidez no es la única cualidad necesaria para configurarse como un project manager de esta era. También es preciso ser muy adaptable.
Los equipos de proyecto son más flexibles y móviles que nunca. La búsqueda del talento y las posibilidades de la tecnología hacen que sea, cada vez más frecuente, contar con grupos de trabajo remotos. Incluso las reuniones de estado de proyecto pueden realizarse telemáticamente. Pero, para conseguir que funcione, los Directores de Proyecto deben equipar sus equipos con las herramientas necesarias para administrar su información. Y, además, también tienen que:
- Saber priorizar. Perder rigidez no significa olvidarse de una estructura o plan de base. Lo importante debe tenerse presente.
- Invertir el tiempo necesario en la distribución de tareas y, volver a hacerlo cada vez que sea preciso realizar nuevos ajustes.
- Actuar con transparencia, algo que puede conseguirse con los avances que permiten el procesamiento en tiempo real y el intercambio de datos online.
Por último, el nuevo project management ha de ser consciente de la importancia de compartir. La transparencia es un imperativo cultural en muchos lugares de trabajo y ahora, con los equipos de proyecto globales y multidisciplinares, resulta esencial.
Los negocios digitales son transparentes y no dudan en compartir información con los empleados. El trabajo así planteado minimiza el riesgo, fomenta la conexión y cohesión entre las personas y aumenta los niveles de productividad.
Una cultura de intercambio de datos resulta muy beneficiosa en el entorno de proyecto y, para mantenerla, el Project Manager deberá asegurarse de que:
- La seguridad de la información está garantizada.
- El aseguramiento de la calidad de los datos se entiende como un compromiso compartido por todos.
- El acceso a los datos autorizado puede darse en condiciones óptimas.
La era digital hace más cómodo el trabajo del Director de Proyecto y sus equipos, aunque también les plantea nuevos retos, relacionados con la redefinición de algunos procesos y la transición hacia un nuevo modelo de gestión. Adaptarse a la velocidad del cambio, no obstante, es un imperativo y requiere de un líder digital fuerte y despierto. ¿Encajas en este perfil? ¿Estás preparado para el nuevo project management?