¿Qué es un Cuadro de Mando Integral?: Ejemplo
¿Cómo saber si nuestra empresa está yendo por los carriles correctos? ¿Cómo identificar las fugas? ¿Cómo profundizar los aciertos? Contar con un Cuadro de Mando Integral ―o balanced scorecard― es clave para tener siempre a mano la respuesta a estas preguntas, al poder monitorear los KPIs (Indicadores Clave de Performance) que hayamos definido y ajustar nuestra gestión de proyectos para que se mantenga siempre en línea con nuestra estrategia empresarial.
Ahora bien, ¿qué es exactamente un Cuadro de Mando Integral?
Cuando hablamos de Cuadro de Mando Integral (CMI o Balanced Socrecard) nos referimos a una herramienta fundamental con la que cuentan las empresas para identificar y medir qué es lo que está pasando en cada una de las áreas y departamentos que la conforman.
El CMI muestra una fotografía de lo que en ellos sucede. Contar con esta herramienta nos permite controlar y supervisar si los objetivos planteados dentro de la estrategia de la empresa se están cumpliendo o no, de qué modo, o por qué causas estamos teniendo desvíos no deseados. Esta herramienta es dinámica, es decir, es de suma utilidad para tener una visión panorámica de toda la cadena de valor, sí y sólo sí, se mantiene actualizada permanentemente.
Desde la Dirección General hasta los responsables de cada área, cuentan con información que les permite tomar decisiones. Por ejemplo, si en una empresa industrial se detecta de forma temprana que Producción proyecta estar por debajo de los indicadores especificados al inicio por faltante de materias primas importadas que están llegando con retraso, las áreas conectadas con producción y que dependen de ésta, como Comercial, Logística, Marketing, Atención al Cliente, Finanzas, pueden realizar los ajustes necesarios a sus indicadores y reunirse para pensar en acciones alternativas posibles; para que la facturación prevista no se vea impactada por estos productos que no estarán disponibles por un determinado tiempo.
Es decir, el Cuadro de Mando Integral, minimiza gran parte de los problemas que se generan en las empresas por la fragmentación reinante en la operatoria. Esta desconexión se produce porque sigue estando ausente una comunicación fluida entre los diferentes “silos”.
¿Es necesario contar con un Cuadro de Mando Integral?
¡Sin duda! El CMI nos proporciona un marco, una estructura y un lenguaje para comunicar la misión y estrategia de nuestra empresa, nos brinda una fotografía del estado de funcionamiento y avance de cada una de las áreas y nos facilita las mediciones con las que informamos a los miembros de nuestros equipos cuales son las causas del éxito, tanto actual como futuro.
Pero además evita reclamos por parte de los clientes por incumplimiento por parte de la empresa (el caso mencionado de una empresa industrial con faltante de materias primas) y facilita tomar acciones con anticipación, antes de que nos explote una bomba por la falta de comunicación entre áreas.
¿Dónde se aplica el CMI?
Si bien puede ser visto como una herramienta de control, es recomendable que el CMI sea utilizado más bien como un sistema de comunicación, de información y de formación. Como un medio de cohesión, de comunicación asertiva, que sea una herramienta de gestión de equipos a nuestro favor a la hora de conducir hacia los objetivos deseados. Una herramienta fundamental dentro del kit de las habilidades gerenciales, ya que transforma la misión y la estrategia empresarial en objetivos e indicadores claros, organizados en cinco perspectivas: cliente, procesos internos, financiera, recursos humanos y comunidad.
¿Cuáles son los pasos a seguir para realizar un Cuadro de Mando Integral?
Se recomienda seguir cinco etapas para la construcción de un CMI:
1) Definir la estrategia, cuyo diseño requiere ser precisos en la definición de los resultados que se espera alcanzar
2) Definir los objetivos para cada una de las cinco perspectivas, vinculando entre sí los objetivos en modo causa-efecto
3) Elegir los indicadores correctos, los que nos permitan medir cada una de las aristas de nuestra estrategia de un modo simple, claro y directo.
4) Trabajar en el aspecto operacional: es decir elegir las acciones concretas que deben ser realizadas para lograr los objetivos planteados
5) Construir el cuadro propiamente dicho: lo puedes hacer en cualquier hoja de cálculo o programa que te resulte amigable. Lo importante es que veas con claridad el cruce entre las perspectivas y los objetivos, los indicadores y las iniciativas.
¿Cuáles son los indicadores del Cuadro de Mando Integral?
Llamamos indicador o KPI a todo elemento que pueda ser medible. En el caso de nuestro Cuadro de Mando Integral, estará compuesto por aquellos que permitan a la gerencia analizar cuál es su situación actual y cuál la relación con la situación esperada, con los objetivos buscados, identificados en la estrategia empresarial. Los indicadores nos orientan también acerca de cuáles son las acciones adecuadas que tenemos que llevar a cabo para avanzar en el sentido que nos acerque, que nos conduzca, hacia los objetivos esperados. Aquí puedes ver un ejemplo de un CMI desarrollado en excel para ver con claridad los indicadores clave o KPI, que pueden orientarte para desarrollar el propio.
Es importante que adoptes el Cuadro de Mando Integral entre el kit de herramientas de tu empresa ya que constituye un gran aporte a tu visión estratégica, uno de los pilares que se trabaja en el Executive MBA de OBS School, el máster que te proporciona, como directivo, una visión estratégica global para aumentar tu potencial en gestión de organizaciones.
