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Cuando China innove el mundo temblará

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Esto lo hubiera dicho Napoleón Bonaparte si hubiese leído el reciente discurso del presidente de la República Popular China, Xi Jinping, durante la ceremonia de apertura de la reunión del G20 que se desarrolló la semana pasada en Hangzhou. El título del discurso “Un punto de partida para el desarrollo de China. Un nuevo plan para el crecimiento global” ya establece un posicionamiento claro sobre lo que se pretende obtener desde la máxima institución del país; y la innovación es claramente uno de los pilares de ese plan.

En este discurso se exponen una serie de frases y conceptos que considero son interesantes de tener en cuenta:

  •  “La innovación científica y tecnológica es la clave para el desarrollo.”

Esto se ha convertido en un paradigma y en un mantra desde hace unos años; que no tiene por qué ser cierto si lo que se hace no favorece el entorno económico y empresarial de los países en los que se invierte en I+D. El desarrollo de una economía basada en la innovación ha de tener un tejido y un ecosistema empresarial que pueda utilizar las innovaciones en las que se han invertido tanto recursos públicos como privados.

  •  “Muchos sectores de la economía de China pese a tener gran tamaño no son fuertes o competitivos  porque han dependido de la entrada de recursos, capital y mano de obra para lograr el crecimiento y ampliar la escala; un modelo que ya no es sostenible.”

Esto supone que se establece que el tamaño ya no es una ventaja competitiva cuando se pretende crear una economía basada en la innovación. Además los crecimientos basados en mano de obra, normalmente poco cualificada y con bajos salarios establece un modelo que no tiene continuidad cuando la base del crecimiento es la innovación porque para ello se requiere de personas con formación y que además aporten su creatividad e ingenio; esto crea un incentivo a la movilidad de aquellos que consideren que no estén adecuadamente retribuidos y por tanto supone la entrada del tema de la gestión y retención del talento en la agenda estratégica de aquellas organizaciones que quieran innovar .

  • “Se está implementando una estrategia de desarrollo impulsada por la innovación con el objetivo de crear un crecimiento basado en la calidad en lugar de la cantidad.”

El cambio de modelo económico basado en la innovación recuerda al que realizó Japón en los años 60 del siglo pasado cuando pasó de ser una economía que copiaba y fabricaba productos de baja calidad a ser una economía que desarrollaba y fabricaba nuevos productos de calidad contrastada.

  •  “Se incentivaran los avances en los principales proyectos y áreas prioritarias, complementándolo con la toma de la iniciativa en la realización de los principales programas y proyectos científicos internacionales”.

Adquirir las capacidades para liderar los desarrollos avanzados en cualquier campo de la I+D supone obtener los conocimientos que permitan orientar las estrategias de política industrial y empresarial hacia los sectores y mercados que a medio y largo plazo lideraran la economía mundial.

  • “Se conducirá a una investigación para conocer y resolver los problemas científicos y tecnológicos que sostengan el desarrollo económico e industrial”

Con esta visión se introduce un elemento significativo en la estrategia de I+D que, sin duda, choca con la visión que se tiene en determinados estamentos científicos y universitarios de algunos países. Este elemento es que la I+D estará orientada a solucionar problemas que permitan el desarrollo económico e industrial; es decir, que la investigación “basada en las aficiones del catedrático” no siempre será aceptada.

  • “Se acelerará la comercialización de los logros de investigación y desarrollo”

Aquí se introduce el tema del gap existente entre la universidad y la empresa que se produce en todos los países de mayor o menor medida; y que muchas veces se debe a una animadversión entre ambos entornos debida fundamentalmente a una falta de conocimiento de las necesidades de ambos, pero sobre todo a una visión de que es necesaria una relación basada en el “yo gano – tu ganas”.

  • “El objetivo es mover las industrias y productos hacia el rango medio-alto de la cadena de valor y crear más áreas de crecimiento impulsadas ​​por la innovación con las ventajas de los primeros que conduzcan al desarrollo”

Este objetivo me recuerda al cambio estratégico que hizo Samsung a principios de siglo y que se explicaba en este artículo de Forbes donde se exponía que la Alta Dirección decidió transformar la empresa desde una posición de “fast follower” a “innovative leader”; y este es sin duda el objetivo que se pretende para China, es decir, pasar de ser un país que copia a ser un líder innovador.

Como vemos hay motivos suficientes para que hoy en día Napoleón Bonaparte hubiera dicho “Cuando China innove... el mundo temblará”.