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La tendencia del Director de RRHH

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Los directores de Recursos Humanos se transformarán en los próximos años en gestores del talento de las personas. La gestión de emociones y la contribución a la configuración de la cultura corporativa serán sus principales atribuciones. Podríamos destacar ocho tendencias relevantes en el futuro de los recursos humanos en la próxima década:



  • Las empresas tomarán menos en cuenta calificaciones académicas, y pondrán el foco en el talento emocional y en la capacidad de las personas de dejarse la piel por sus organizaciones.

  • El desarrollo vertical: el conocimiento y la experiencia se transmitirán en cascada y cada empleado será responsable de su propio desarrollo.

  • Se desarrollarán estrategias concretas para aprovechar la experiencia y la pericia de los mayores de 55 años. Lo que se denomina la nueva Gestión de la edad.

  • El teletrabajo y el flexitime serán la norma básica del trabajo, como consecuencia de la adaptación de las compañías a las nuevas tecnologías.

  • Se desarrollará dentro de las empresas sus propias universidades, basados en el concepto de “aprendimiento” entendido este como el aprendizaje continuo a lo largo de toda la vida.

  • En plena economía del conocimiento, los departamentos de Recursos Humanos se convertirán en departamentos de Personas, y tomarán como misión el fortalecimiento de la creatividad e innovación para mejorar la gestión de las mismas.

  • El éxito de las compañías pasará por los intraemprendedores, que es como Equipo Humano define a aquellos empleados capaces de generar ideas, de forma estructurada, para que las empresas para las que trabajan crezcan como si fueran suyas.

  • Se impondrá la holocracia: Los círculos de tomas de decisiones, autorregulados, y con responsabilidad directa sobre la ejecución y control de los objetivos de la empresa modificarán la estructura jerárquica de las organizaciones.


Los recursos humanos van a pasar por dejar de ver a los empleados como recursos, y empezar a verlos como personas con talento y capaces de grandes dosis de creatividad.


Las organizaciones no están adaptando su forma de gestionar las organizaciones al mercado. “La Cuarta Revolución Industrial”. “El gran cambio”. “La era digital”. Todas estas expresiones se han utilizado para definir las transformaciones sociales y económicas que estamos viviendo en el siglo XXI, provocadas en gran medida por una revolución tecnológica que ya ha cambiado el mundo en el que vivimos.


Para que las organizaciones se puedan adaptar a estos nuevos retos; el director de RRHH debería priorizar a un futuro, a medio plazo, a:


Una organización moderna, dinámica y en red: La mayoría de empresas está apostando por una reorganización más flexible y dinámica, que deje atrás las estructuras jerárquicas del pasado y pueda responder ágilmente a los cambios del mercado. Se está imponiendo la organización de la empresa en torno a pequeños equipos de trabajo, los cuales se forman en poco tiempo, trabajan juntos durante uno o dos años y luego se mueven hacia otros proyectos dentro de la compañía.


Los empleados no dejan de formarse nunca: La carrera de un empleado puede durar 30 o 40 años. Teniendo en cuenta la velocidad de los cambios tecnológicos, ¿cómo prepararse para lo que va a pasar en las siguientes décadas? La solución pasa por el aprendizaje continuo. Ya no podemos conformarnos con ir a la universidad y basar nuestro futuro laboral en lo aprendido durante esos años; ahora nuestra carrera profesional se ha convertido en un aprendizaje continuo.


Adquisición de talento: En una economía basada en el conocimiento y el capital humano, la adquisición de talento es vital para cualquier empresa. Envueltos en esta gran revolución tecnológica, las compañías están en una constante búsqueda de profesionales especializados en las nuevas áreas de la actividad económica que surgen prácticamente de la noche a la mañana.


Para lograr reclutar (y después mantener) a los mejores, los responsables de recursos humanos están utilizando las redes sociales, nuevas tecnologías cognitivas y el big data. La utilización de vídeos (con plataformas como HireVue), formularios online, redes sociales (no sólo LinkedIn) y entrevistas por Skype (el último paso) se ha extendido a toda velocidad, agilizando los procesos de contratación y reduciendo costes.


Mejorar la experiencia de los empleados en la empresa: Los responsables de recursos humanos se están volcando en mantener la cultura corporativa de las empresas, en mejorar la motivación, en prestar atención a las nuevas demandas de los Millenials y en ofrecer mejores oportunidades de formación a sus trabajadores.


Nuevas formas de evaluar el rendimiento de los trabajadores: La forma de ascender en la empresa o de recibir un aumento salarial está cambiando. La experiencia, el paso de los años o los exámenes han dejado de ser la principal forma de evaluación para avanzar hacia un modelo más rápido y flexible. Los departamentos de recursos humanos están buscando nuevos modelos de evaluación basados en objetivos bien definidos y feedback continuo.


Un nuevo liderazgo: Si los tiempos han cambiado, sus líderes también. En todo el mundo, las compañías buscan un nuevo tipo de liderazgo que sea capaz de adaptarse a las transformaciones económicas y sociales que estamos viviendo. La tendencia apunta a líderes más jóvenes y diversos, que sean capaces de dirigir los negocios de forma digital. Su capacidad para gestionar equipos pequeños, ágiles y dinámicos está entre las más demandadas por las compañías, junto con su interés en seguir aprendiendo y formándose a lo largo de toda su carrera.


Unos recursos humanos digitales: Si todas las organizaciones viven ya dentro del mundo digital, lo mismo pasa con los departamentos de recursos humanos. Su responsabilidad es la de llevar nuevas iniciativas digitales a lo largo y ancho de toda la estructura laboral, implementando nuevas aplicaciones móviles, (Slack, Workplace, Microsoft Teams, Gamelearn…), software y herramientas que ayuden a cambiar la forma de trabajar dentro de la compañía. En este sentido, incluso servicios de chatbot que utilizan la inteligencia artificial para la contratación se están haciendo un hueco en las empresas más innovadoras.


El Big Data al servicio de los recursos humanos: Hoy más que nunca, los números son poder. Y los recursos humanos no se están quedando al margen de la revolución del Big Data. Cada vez más, las empresas utilizan datos sobre sus empleados para mejorar los procesos de selección de personal, aumentar la productividad de la empresa o detectar errores logísticos.


Promover la diversidad y la inclusión: si las compañías intentan ser cada vez más globales, digitales y transparentes, entonces no pueden olvidarse de promover la diversidad y la inclusión. Los empleados cada vez valoran más estos principios y los propios consumidores se han vuelto más exigentes a la hora de pedir respeto por la diversidad cultural y la igualdad de género. Desde el departamento de Recursos Humanos, una política que promueva la diversidad y la inclusión entre los empleados no sólo puede hacer a la empresa más eficiente, innovadora y productiva, sino también mejorar su imagen de marca y su reputación.


Encontrar el equilibrio entre máquinas y empleados: Las nuevas tecnologías suponen un nuevo reto para todos los empleados, pero también para los responsables de Recursos Humanos. ¿Qué trabajos pueden ser sustituidos por máquinas y cuáles deben ser realizados únicamente por personas?


Reflexión: ¿Pasaremos de Recursos Humanos a Humanos con Recursos?