Las redes 6G son un futuro que aún está por definir

Nueva generación tecnológica

La evolución acelerada de muchas de las tecnologías que se usan en los productos y servicios son una fuente de incertidumbre y de ansiedad para los directivos y gerentes empresariales. Eso es especialmente significativo cuando una tecnología se está implantando en uno o varios sectores y ya se está hablando de la nueva generación de esa tecnología. 

Un claro ejemplo lo tenemos en las tecnologías de la telefonía digital donde está en marcha el despliegue mundial de las redes de 5G, que en algunos país está avanzando mientras que en otros aún se usan redes de comunicaciones de versiones más antiguas. Y en esa situación ya se está visualizando el 6G y sus potenciales beneficios; y proveyendo pruebas y primeras implementaciones para el año 2030, es decir, a una distancia de solo ocho años. 

Sobre esta nueva red uno de los principales desarrollos que se deben conseguir es la determinación de los estándares que serán necesarios para que las comunicaciones entre los diferentes dispositivos sean no solo efectivas, eficientes y eficaces; sino que también sean seguras.  

Al respecto se especula que en el 6G se profundice en conectar los mundos digitales, físicos y humanos de forma que se produzca una integración entre los tres que reduzca o elimine los problemas que se han encontrado tanto en el 5G como en las anteriores. 

Tecnología 6G

El 6G que debe suceder al 5G, no solo debe gestionar y admitir el uso de dispositivos móviles de cualquier tipo, sino que también deberá admitir y gestionar las tecnologías de vehículos digitalizados (conectados a internet, autónomos, con sistemas de sensores y de inteligencia artificial). Pero también deberá gestionar la diversidad de hogares inteligentes, así como las Smart Cities. El objetivo por conseguir es la conectividad perfecta entre la vida cotidiana y la red global digital.  

Dentro de las características o especificaciones tecnológicas que habría que esperar del 6G hay dos que destacan por su importancia: las velocidades de descarga, las frecuencias y la latencia.  

Así las velocidades de descarga de las redes 6G deberán ser sustancialmente más altas que las del 5G de forma que se obtenga una velocidad máxima de 1Terabyte por segundo, que es 100 vece superior a la de 5G.  

Característica

Con respecto de las frecuencias se vislumbra que se usarán frecuencias más altas y que permitan mayores capacidades de señal con lo que se especula con nuevos equipos que usen un mayor volumen y diversidad de frecuencias de ondas de radio, incluyendo espectros de frecuencia extremadamente altos (EHF) que permitirán velocidades ultra ultra altas y una gran capacidad de datos en distancias cortas. 

Por lo que se refiere a la latencia, es decir, el tiempo exacto que tarda un paquete de datos en trasmitirse por una red entre el emisor de esos datos y su receptor. Es p.ej. el tiempo que se requiere en un juego en línea desde el momento que se hace un movimiento con el mando del juego, el servidor del juego recibe la orden, la ejecuta y se envía la señal para que se muestre en pantalla. Cuanto menor sea esa latencia mejor será la conexión a internet y, en el caso del juego su jugabilidad.

Además, en las redes 6G se deberá usar la inteligencia artificial y el aprendizaje automático con el objetivo de mejorar la eficiencia de las redes y su asistencia; asimismo se deberán obtener mejores resultados en sostenibilidad con lo que estas redes deberán ser más eficientes que el 5G y además consumir menos energía, lo cual va a ser un reto complejo debido al sustancial aumento de volumen de datos que supondrá. 

Seguridad y confiabilidad

Otro tema que no se deberá olvidad es la seguridad y confiabilidad de las redes y de los dispositivos que las utilicen. Por un lado, será importante la privacidad de los usuarios y de sus datos, pero lo que será sustancialmente relevante es que se tenga consistencia, confiabilidad y rapidez en la entrega de datos extremo a extremo. Que es lo que p.ej. se necesitara en la gestión de las operaciones de los vehículos sin conductor para que sean seguras y eficientes, y sin que haya que preocuparse por potencialmente peligrosas fallas de latencia. 

Acceso

A todo esto, habría que añadir un énfasis en conseguir un acceso global lo más amplio posible que dé respuesta a las necesidades económicas y sociales de una nueva época. Se deberá dar servicio a un mayor número de usuarios, en todo momento y circunstancia, para conseguir realmente el acceso universal a las comunicaciones a costos sostenibles. 

Es evidente que las empresas que ahora empiezan a implementar el 5G o prevén hacerlo a corto plazo hablarles del 6G puede suponer una inquietud sobre las inversiones que están haciendo. Sin embargo, hay que ser conscientes que el mundo tecnológico en el que nos ha tocado vivir hace que debamos estar vigilantes sobre lo que viene para prever cuales van a ser las futuras necesidades tanto nuestras, como de nuestros clientes o de nuestro entorno.