imagen post blog default

Microsoft is back!

Blog |

A finales de abril Microsoft se convirtió en la tercera empresa que supera el $1 Trillón (millón de millones) de valoración. Previamente ya lo habían conseguido Apple y Amazon (ambas compañías tecnológicas). De hecho las tres compañías en el momento de escribir estas líneas están por debajo del trillón de valoración, siendo Microsoft la más valiosa de las tres.

La valoración en los mercados financieros no deja de ser un indicador más del milagro de Microsoft desde el reemplazo de Steve Ballmer como CEO en favor de Satya Nadella que en ese momento era el jefe del Cloud de la compañía. A continuación un gráfico que visualiza el “milagro” de la compañía desde el desembarco de Nadella.

En estas líneas me gustaría destacar brevemente algunas de las claves del resurgir de la compañía.

  • Primero los antecedentes: Microsoft perdió el tren de Internet y del móvil tratando de defender su modelo de negocio basado en la venta de licencias de su sistema operativo Windows y suite de productividad Office, sus productos estrella, y la opción por defecto en las empresas. La realidad es muy tozuda y Microsoft se dio cuenta de sus errores (tarde), e intento compensarlo a base de músculo financiero con todo un historial de adquisiciones para comprar tiempo en los negocios de internet y mobile. Lo ha intentado de todas las formas con su buscador Bing o bien con la compra de Nokia o con sus diferentes sistemas operativos para dispositivos móviles. Nada ha funcionado: Windows Phone, Nokia o Bing son players residuales en sus negocios. Y todo por no abrazar el cambio por miedo a perder la “gallina de los huevos de oro” del negocio de las licencias. El punto de aprendizaje es que no se puede ir contra las tendencias por muchos recursos que tengas. Microsoft lo ha aprendido a golpe de fracasos.
  • El cambio de liderazgo ha traído un cambio de cultura muy necesaria. El liderazgo de Steve Ballmer era un liderazgo autoritario y muy vertical. La ascendencia de ser uno de los impulsores de la compañía desde sus inicios provocaba demasiadas restricciones. La Microsoft de Ballmer era una empresa ideal para un el contexto de finales del siglo XX y la primera década del siglos XXI, pero no para los tiempos actuales donde las empresas necesitas mayor agilidad, las organizaciones más colaborativas y de liderazgos facilitadores en vez de autoritarios. Es un cambio social derivado del cambio generacional. Y Nadella ha demostrado ser ese líder para estos nuevos tiempos.

Para muestra una de sus primeras decisiones fue desarrollar las apps de Office para el iPad. Con la anterior dirección hubiese sido inimaginable; Office era la palanca de su plataforma y el axioma era que si el iPad no tiene Office, la gente se pasaría a los productos de la compañía de Redmon (la familia Surface) para poder trabajar con los omnipresentes Word, PowerPoint y Excel. Microsoft pensaba que la “gravedad” de Office era suficientemente fuerte. Pero el éxito arrasador de los dispositivos de Apple tanto en consumo como en empresa, y el fracaso del hardware de Amazon y Google eran más que un indicio. El iPad / iPhone tienen mayor “masa gravitacional” que Office, por lo que si Office no está disponible para los dispositivos de Apple, los usuarios probarán alternativas como iWork de la misma Apple o Google Docs. Con el Cloud, Office pierde peso. Pero para poder tomar estas decisiones en una compañía tan grande y con tanta inercia como Microsoft es necesario un cambio cultural que ha de ser impulsado por un nuevo liderazgo. Y Satya Nadella lo ha conseguido. Sin este cambio cultural previo, cualquier decisión de calador ulterior está condenada al fracaso.

  • Nueva estrategia basada en abrirse a nuevos ecosistemas. No solo el desarrollo de Office para iOS es un buen ejemplo del cambio estratégico, sino que la compañía ha abrazado el software libre culminada con la compra del repositorio de código Github, una compra que ha suscitado mucho escepticismo entre la comunidad open source dado los antecedentes de la compañía en su relación con el software libre. Pero todo indica que la apuesta de Microsoft por el software libre es auténtica y muy decidida. En noviembre del 2016 Microsoft entró a formar parte de la Linux Foundations y ha abierto el código de Office y Windows. Un cambio estratégico de 180º.

Microsoft CEO Satya Nadella has just announced that Microsoft has become a completely open source company. It means that you can now grab all software like Windows and Microsoft Office for free and get your hands on their source code as well.

  • Defensa y potencia de su core business. Cambiar no quiere decir romper con todo lo anterior que tan bien les ha funcionado históricamente. Sus blockbusters Windows y Office siguen teniendo una salud de hierro. El primer es el sistema operativo líder en los ordenadores desktops con más del 85% del mercado, donde las alternativas como MacOs y las decenas de distribuciones de Linux tienen una presencia testimonial. Su pack de productividad Office sigue muy arraigado en las empresas y su transición al Cloud con la propuesta Office 365 bajo un modelo Saas está siendo todo un éxito y uno de los motores de crecimiento de la compañía. En la nota de prensa de resultados del Q2 del 2019 lo constatan:

Office Commercial products and cloud services revenue increased 11% (up 11% in constant currency) driven by Office 365 Commercial revenue growth of 34% (up 33% in constant currency).

Microsoft tiene unos mercados cautivos desde sus inicios, como son el sistema operativo de los ordenadores (no así en dispositivos móviles donde Android y iOS son el nuevo Windows), y su suite de productividad para empresas que ha sabido reformatear en un servicio SaaS añadiendo nuevas prestaciones como Microsoft Team que es su killer app de Slack, y Skype (su Zoom) aplicación comprada en el 2011. Son dos cash cows que han sabido potenciar y actualizar.

  • En tiempos acelerados como los actuales, sobretodo en el sector tecnológico, se imponen liderazgos bipolares: por un lado seguir manteniendo lo que funciona, y por otro impulsar nuevas áreas de crecimiento. En el sector tecnológico una de estas áreas es la nube (Cloud). El Cloud de Microsoft es su plataforma Azure. En este negocio hay un líder destacado que es Amazon con su AWS, y los otros dos contendientes son Google Cloud y Azure de Microsoft.

Como hemos comentado al inicio, Microsoft llega tarde al Cloud, pero ahora mismo Azure es el principal motor de la compañía (recordemos que Nadella era el anterior jefe de Azure) con crecimientos interanuales del 73%. Microsoft está recuperando el terreno perdido en un área clave para su futuro.

Captura de los resultados del Q3 2019

Parte del éxito del Cloud es una gran propuesta de valor para las empresas que ven a Microsoft como un partner tecnológico con solvencia contrastada por la experiencia. Un pilar de esta nueva propuesta es Office 365, el Office en la nube. Microsoft pasa de vender licencias a alquilar su software. Traducido al lenguaje de las empresas es convertir una inversión en coste variable de pago por uso, liberando Capex para otros menesteres. Para Microsoft supone asegurarse una recurrencias de ingresos y mejorar la retención de sus clientes; una vez has optado por un software concreto, éste pasa a convertirse en un legacy con unos altos costes de cambio. Por lo que si introduces a Office 365 en tu vida, te estás casando con Microsoft. Pero Office siempre ha estado junto a nosotros desde el inicio de nuestras carreras profesionales. Es nuestro amigo de la infancia. Puedes confiar en él.

Concluyendo, Microsoft lo está haciendo muy en todas sus áreas de negocio y lo que es más importante, su imagen de empresas tecnológica “viejuna” frente a los “jóvenes” Google y Facebook, y al always cool de Apple, se ha revitalizado. Ha sabido cambiar para adaptarse a los nuevos tiempos (apertura a nuevas plataformas, open source, Cloud, Saas), sin renunciar a sus negocios “cautivos” como son las grandes y medianas empresas donde tiene una reputación de proveedor solvente con una dilatada trayectoria, modernizando su propuesta de valor con nuevos modelos de negocio y nuevas aplicaciones. Larga vida a Microsoft.