El Liderazgo de Productividad y orientación a resultados, ¿qué es un objetivo SMART?

El Liderazgo de Productividad y orientación a resultados

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Seguramente estaremos de acuerdo en que un buen líder debe ser ejemplo de productividad. Pero,

¿A qué llamamos productividad? 

Si bien hay quienes consideran que la productividad es una actitud, un convencimiento de que cada día es posible lograr mayores y mejores resultados, prefiero destacar el aspecto medible de este concepto. Mejorar diariamente es por supuesto deseable, pero fundamental es mejorar conforme a objetivos, es decir alcanzando los objetivos propuestos y hacerlo en el tiempo esperado. 

La productividad en una empresa

Cuando hablamos de productividad en una empresa, nos referimos a la eficiencia de la inversión en relación con los ingresos que se reciben y esto definitivamente nos introduce de lleno en la planificación, en la definición de metas y en el diseño de las estrategias necesarias para alcanzarlas. 

¿Y quién sino un líder, un buen líder, es la persona que debe identificar estos caminos, mejorar constantemente la productividad, establecer las pautas para alcanzar las metas, analizar los resultados de cada etapa, ajustar lo que haga falta, inspirar a su equipo a partir de su propio ejemplo, encabezar, en fin, la estrategia? 

Un buen líder deberá tener bien en claro cuáles son los objetivos de la empresa de la que forma parte y del rol que cumplen tanto él como su equipo dentro de ella, saber qué se espera de su área y cuáles, dentro de los objetivos generales, son los objetivos particulares que les corresponde alcanzar. Y me detengo acá que es el punto crucial, ya que cuando hablo de objetivos me refiero siempre a objetivos SMART: es tarea de un líder, de un buen líder, de un líder productivo y orientado a resultados, definir los objetivos SMART que corresponden a cada etapa de su trabajo.  

¿Qué significan las siglas SMART?

¿Qué es un objetivo SMART y por qué lo escribo con mayúscula? 

Un objetivo SMART refiere a una sigla que, además, nos resultará de mucha utilidad como recordatorio o ayuda memoria. Si desglosamos la sigla nos encontraremos con las características que debe tener un objetivo para corresponder a esta categoría: 

  • Specific 
  • Measurable 
  • Achievable 
  • Realistic o Relevant 
  • Timely o Time bound 

Es decir que nos referimos a un objetivo SMART cuando hablamos de un objetivo específico, mensurable o medible, alcanzable, realista, relevante y a lograr en un período de tiempo definido específicamente.  

Acciones a evitar

Debemos evitar perseguir metas generales, no identificadas con precisión, de lo contrario generaremos confusión, desorientación, frustración, malestar en nuestros equipos, ya que no sabrán con claridad hacia dónde dirigir sus esfuerzos ni podrán identificar si avanzan o no, si sus esfuerzos dan frutos o no, en fin, si la meta no es clara, tampoco lo es su consecución.

Como deben ser los objetivos SMART

Nuestros objetivos deben ser medibles: ya sabemos que lo que no se mide no se puede mejorar, pero también alcanzables: tan importante como la ambición es saber dónde estamos parados y qué es posible lograr desde ese lugar y con los recursos con los que contamos y es por eso también que deben ser realistas y relevantes: alineados con los objetivos generales de la empresa de la que somos parte. Finalmente, un objetivo tiene que tener un plazo, tiene que estar inscripto en un período de tiempo específico. A modo de ejemplo, si fijo el objetivo de incrementar las ventas de mi empresa en un 10%, tengo un objetivo específico, tengo un objetivo medible, tengo un objetivo que es alcanzable, no es excesivamente ambicioso y es absolutamente relevante, pero si ese objetivo no está inscripto en un período de tiempo la ecuación no cierra: no es lo mismo trabajar para alcanzar ese objetivo durante un mes que hacerlo durante un año, lo que en un caso puede ser un sinónimo de éxito, en el segundo lo es, sin duda, de fracaso.  

Con todo esto claro, veremos que en este sentido la tarea del líder es sumamente importante. Debe ser consciente de los objetivos de la empresa, de los suyos y de su equipo, debe estar alineado con la estrategia general y debe identificar y definir objetivos SMART. Debe ser perfectamente capaz de conducir a su equipo a alcanzar las metas y a orientar los esfuerzos hacia los resultados esperados para cada período. A ellos deben conducir sus estrategias, su plan de acción. Y debe tener claros todos y cada uno de los recursos con los que cuenta para lograrlo. 

Características de un buen líder

Un buen líder debe alcanzar altos niveles de desempeño y debe equilibrarlos entre el corto y el largo plazo. Debe evitar, por sobre todas las cosas, caer en la trampa del corto plazo. Todos los resultados son importantes, por supuesto, pero un buen líder debe ser capaz de mirar más allá, de observar el panorama general, de ampliar la perspectiva, de pensar, también, en el mediano y en el largo plazo. Un equilibrio entre ellos lo llevará a buen puerto, a él y a sus colaboradores. 

Un buen líder debe conocer a las personas con las que trabaja, sus inquietudes, sus expectativas, sus herramientas y sus posibilidades. Las metas, los objetivos que pueda trazar, debe incluirlas, ya que son quienes, al fin y al cabo, lograrán o no los resultados. Que el árbol no nos tape el bosque, que el resultado no invisibilice a las personas. Cuando te preguntes qué impacto tienen tus acciones en tus resultados, no olvides preguntarte qué impacto tienen en las personas con las que trabajas, tanto en el corto como en el largo plazo. Es el líder quien debe mantener el equilibrio para lograr que los altos niveles de desempeño de un equipo puedan, además, sostenerse en el tiempo.  

Venimos hablando de las características que debe tener un buen líder y nos basamos, entre otros estudios, en el que realizó Google y a partir del cual mejoró considerablemente el rendimiento de las personas en cargos gerenciales dentro de su empresa. A partir de este estudio no solo identificó las ocho características principales de un buen líder, sino que las ordenó jerárquicamente, en orden de importancia. La productividad y orientación a resultados, como vimos, está entre ellas. Pero, contrario a lo que podría suponerse, no está en primer lugar, sino en el cuarto.  

Para conocer las otras habilidades que todo buen líder debe poseer invitamos a leer Menos jefe, más líderEl líder actual necesita ser un buen coach o Un buen líder no micro gerencia. Seguiremos desarrollando cada una de ellas en próximos artículos.